El aumento de la esperanza de vida en el último siglo ha derivado en un envejecimiento de la población global. Según la Organización Mundial de la Salud, el concepto de envejecimiento activo es el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas a medida que envejecen. Como en todas las etapas de la vida, los aspectos físicos, psíquicos y sociales no deberían abordarse de forma aislada, sino que es necesaria una visión integradora de todos ellos.